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<p>Tapar la webcam con cinta o fundas es un gesto común, pero según <strong>Kaspersky Lab</strong>, los ciberdelincuentes ahora priorizan otro objetivo: <strong>el micrófono</strong>. Mientras la cámara solo capta imágenes puntuales, el micrófono puede grabar conversaciones <em>las 24 horas</em>, incluso con el portátil cerrado.</p>
Dato alarmante: El 63% de los ataques con spyware en 2024 incluyeron acceso no autorizado al micrófono (Informe Kaspersky).
Activación silenciosa: Muchos malwares encienden el micrófono sin mostrar el icono de grabación.
Robo de voz: Los hackers usan grabaciones para estafas de suplantación (como la «estafa del sí»).
Acceso empresarial: Espían reuniones remotas para robar secretos comerciales.
Ejemplo real: En 2024, una empresa perdió 2 millones de euros tras filtrarse un proyecto grabado durante una videollamada.
La luz del micrófono se enciende sin razón.
La batería se agota más rápido de lo normal.
Encuentras archivos de audio desconocidos en el sistema.